Umbral de sonido del oido humano
Límite del umbral de audición
El campo auditivo humano corresponde a una banda específica de frecuencias y a una gama específica de intensidades, percibidas por nuestro oído. Las vibraciones acústicas fuera de este campo no se consideran "sonidos", aunque puedan ser percibidas por otros animales.Frecuencias percibidas por el hombre y algunos mamíferos comunes
gráfico S. BlatrixEl oído humano percibe frecuencias comprendidas entre 20 Hz (tono más bajo) y 20 kHz (tono más alto). Todos los sonidos por debajo de 20 Hz se califican de infrasonidos, aunque algunos animales (por ejemplo, la rata topo o el elefante) los oyen. Del mismo modo, todos los sonidos por encima de 20 kHz se califican de ultrasonidos, pero los hay para un gato o un perro (hasta 40 kHz) o para un delfín o un murciélago (hasta 160 kHz).Intensidades percibidas por el hombre
El campo auditivo humano (verde) está limitado por la curva del umbral (abajo) y una curva que da el límite superior de la percepción del sonido (arriba). En cada frecuencia, entre 20 Hz y 20 kHz, el umbral de nuestra sensibilidad es diferente. El mejor umbral (en torno a los 2 kHz) está cerca de los 0 dB. También es en este rango medio de frecuencias donde la dinámica de la sensación es la mejor (120 dB). La zona de conversación (verde oscuro) muestra la gama de sonidos más utilizada en la percepción de la voz humana; cuando la pérdida de audición afecta a esta zona, la comunicación se ve alterada.
El umbral de audición es
El campo auditivo humano corresponde a una banda específica de frecuencias y a una gama específica de intensidades, percibidas por nuestro oído. Las vibraciones acústicas fuera de este campo no se consideran "sonidos", aunque puedan ser percibidas por otros animales.Frecuencias percibidas por el hombre y algunos mamíferos comunes
gráfico S. BlatrixEl oído humano percibe frecuencias comprendidas entre 20 Hz (tono más bajo) y 20 kHz (tono más alto). Todos los sonidos por debajo de 20 Hz se califican de infrasonidos, aunque algunos animales (por ejemplo, la rata topo o el elefante) los oyen. Del mismo modo, todos los sonidos por encima de 20 kHz se califican de ultrasonidos, pero los hay para un gato o un perro (hasta 40 kHz) o para un delfín o un murciélago (hasta 160 kHz).Intensidades percibidas por el hombre
El campo auditivo humano (verde) está limitado por la curva del umbral (abajo) y una curva que da el límite superior de la percepción del sonido (arriba). En cada frecuencia, entre 20 Hz y 20 kHz, el umbral de nuestra sensibilidad es diferente. El mejor umbral (en torno a los 2 kHz) está cerca de los 0 dB. También es en este rango medio de frecuencias donde la dinámica de la sensación es la mejor (120 dB). La zona de conversación (verde oscuro) muestra la gama de sonidos más utilizada en la percepción de la voz humana; cuando la pérdida de audición afecta a esta zona, la comunicación se ve alterada.
Umbral de audición en db
Los ruidos fuertes pueden provocar una pérdida de audición rápida o a lo largo del tiempoLa pérdida de audición puede deberse a un único sonido fuerte (como los petardos) cerca del oído. O, más a menudo, la pérdida de audición puede producirse con el tiempo por el daño causado por la exposición repetida a sonidos fuertes. Cuanto más fuerte sea el sonido, menos tiempo tardará en producirse la pérdida auditiva. Cuanto más larga sea la exposición, mayor será el riesgo de pérdida auditiva (especialmente cuando no se utiliza protección auditiva o no hay tiempo suficiente para que los oídos descansen entre exposiciones).
Dos sonidos que tienen la misma intensidad no son necesariamente igual de fuertes. La sonoridad se refiere a la forma en que se perciben los sonidos audibles. Un sonido que parece fuerte en una habitación tranquila puede no ser perceptible cuando se está en una esquina de la calle con mucho tráfico, aunque la intensidad del sonido sea la misma. En general, para medir la intensidad, un sonido debe incrementarse en 10 dB para que se perciba como el doble de fuerte. Por ejemplo, diez violines sonarían dos veces más fuerte que un violín.
El riesgo de dañar la audición a causa del ruido aumenta con la intensidad del sonido, no con su volumen. Si tiene que levantar la voz para que le escuchen a un brazo de distancia, es probable que el nivel de ruido del entorno supere los 85 dB de intensidad sonora y pueda dañar su audición con el tiempo.
Rango de audición humana en db
"¿Recuerdas cuando estabas en la escuela y te hacían esas pruebas de audición? Y te esforzabas mucho por escuchar, ¿sabes? Yo quería hacer una prueba de audición increíble. Quería que después se acercaran a mí y me dijeran: "Creemos que puedes tener algo parecido a la superaudición. Lo que oíste fue una bola de algodón tocando un trozo de fieltro. Vamos a enviar los resultados a Washington, nos gustaría que conocieras al Presidente".
Debido al impacto de la exposición continuada a ruidos fuertes a lo largo del tiempo, normalmente cuanto más jóvenes somos, mejor oímos. El rango de frecuencias de audición "normal" de una persona joven y sana es de unos 20 a 20.000 Hz. Aunque el rango audible "normal" para el volumen es de 0 a 180dB, todo lo que supere los 85dB se considera perjudicial, por lo que debemos intentar no llegar a ese nivel.
A medida que envejecemos, lo primero que perdemos son las frecuencias altas. Así, cuando llegamos a la mediana edad, podemos esperar oír hasta unos 14.000 Hz. La pérdida de audición relacionada con la edad (o presbiacusia) se desarrolla de forma natural a medida que envejecemos y nuestra audición puede empezar a deteriorarse como resultado de factores externos, como el entorno y las enfermedades existentes.