Chantaje y extorsión

Extorsión frente a chantaje y coacción
La extorsión y el chantaje son delitos similares. En el estado de California, ambos están cubiertos por una ley (la Ley de Extorsión y Chantaje de California) y tienen las mismas penas, pero estos dos delitos son diferentes.
La extorsión se define como el uso de la coacción para obtener dinero, bienes o servicios de una persona. La coacción puede consistir en violencia, amenaza de violencia, destrucción de bienes o actividad gubernamental incorrecta. La amenaza de negarse a testificar también puede considerarse coacción.
Por ejemplo, tomemos el caso de una banda local en un barrio. Los miembros de la banda se acercan a un pequeño negocio y amenazan con destruir la tienda a menos que el propietario les pague una cuota periódica de "protección". Ese es el delito de extorsión. Otro tipo de coacción es cuando un funcionario público obtiene dinero para realizar un acto oficial, o cuando un agente de policía se abstiene de una detención a cambio de dinero en efectivo.
Aunque alguien chantajee o extorsione "sin éxito" a otra persona, sigue siendo culpable de un delito, pero en este caso se trata de un intento de chantaje o extorsión. El intento de chantaje puede clasificarse como delito menor o como delito grave, dependiendo de la gravedad del delito. Si se trata de un delito menor, la pena puede ser de hasta 364 días de prisión y una multa de hasta 1.000 dólares. Si se trata de un delito grave, las penas impuestas pueden ser de hasta cuatro años de prisión y una multa de hasta 10.000 dólares.
Ejemplo de chantaje o extorsión
El artículo 21 de la Ley de Robos de 1968 define un caso de chantaje como aquel en el que: "una persona, con el fin de obtener un beneficio para sí misma o para otra, o con la intención de causar una pérdida a otra, realiza una demanda injustificada con amenazas. La deshonestidad no es un elemento del delito".
La expresión "exigencia injustificada con amenazas" significa que el autor de un delito de este tipo hace una exigencia infundada a su víctima mediante la intimidación o la amenaza de influir para que le ocurra algo perjudicial si no accede.
Para constituir chantaje, la exigencia y las amenazas en cuestión deben hacerse con la intención de causar un perjuicio a la víctima, o con vistas a obtener algo concreto - por ejemplo dinero o bienes - por parte del autor.
En cambio, normalmente se amenaza a la víctima con exponer información sensible, embarazosa o incriminatoria que sería enormemente perjudicial para la vida de la víctima si se hiciera pública.
En el delito de extorsión, el autor amenaza con causar daños físicos o destruir bienes para obligar a la víctima a cumplir sus exigencias. El chantaje, en cambio, no incluye amenazas de violencia o daños contra la víctima.
Leyes de chantaje y extorsión
Quienquiera que obligue a una persona a darle o a aceptar darle a él o a otra persona un beneficio de naturaleza patrimonial cometiendo un acto de violencia o amenazando con cometer violencia contra la vida, el cuerpo, la libertad, la reputación o los bienes de la persona obligada o de un tercero, de modo que la persona obligada se someta al mismo, se dice que comete extorsión, y será castigado con pena de prisión no superior a cinco años y multa no superior a diez mil baht. Si se comete extorsión:
Quien, obligando a la otra persona a darse o a acordar darse a sí mismo o a la otra persona el beneficio en la naturaleza de ser la propiedad amenazando con revelar el secreto, para causar daño a la persona obligada o a la tercera persona, hasta que la persona obligada se someta a la misma, se dice que dicha persona comete chantaje, y será castigado con prisión de uno a diez años y multa de dos mil Baht a veinte mil Baht.
Si dicho delito se comete en las circunstancias previstas en cualquiera de los apartados del artículo 335, o si se comete contra el buey, búfalo, dispositivo mecánico o maquinaria que el agricultor posea con el fin de llevar a cabo actividades agrícolas, el infractor será castigado con pena de prisión de diez a quince años y multa de veinte mil a treinta mil baht.
Chantaje frente a coacción
El delito de chantaje no es, sin duda, un delito nuevo. El chantaje tiene una larga historia y sigue siendo un delito importante. La idea de coaccionar a otra persona para que haga algo contra su voluntad existe desde hace mucho tiempo. En la era moderna, debemos enfrentarnos al uso de la tecnología para realizar chantajes y extorsiones. La legislación alemana establece la responsabilidad penal de los culpables de cometer chantaje y extorsión. Este delito puede suponer una pena de prisión de hasta cinco años. En casos más extremos, la condena puede alcanzar incluso los diez años de prisión.
(1) Quien ilícitamente, mediante fuerza o amenaza de daño grave, coaccione a una persona para que haga, consienta o se abstenga de hacer un acto, y con ello perjudique el patrimonio de esa persona o de otra con fines de enriquecimiento personal ilícito o de enriquecimiento de un tercero, incurre en una pena de prisión de hasta cinco años o multa.
(4) En casos especialmente graves, la pena es de prisión de al menos un año. Un caso especialmente grave suele darse cuando el delincuente actúa con fines comerciales o como miembro de una banda cuya finalidad es la comisión continuada de extorsiones.